Santo Domingo Norte. – Los residentes del residencial Ciudad Bonita llevan más de cinco años enfrentando una crisis que califican de insostenible: escasez de agua, mala calidad del líquido, fallas constantes en la energía eléctrica y una administración que, según denuncian, no da respuestas ni convoca asambleas para buscar soluciones.
“Nosotros estamos pagando nuestra cuota mensual, casi 700 mil pesos en total, y aún así seguimos sin agua y sin luz. Queremos que se le cobre a quienes no pagan, no al que cumple”, expresó Carlos Guerrero, uno de los moradores.
La comunidad explicó que de las cuatro bombas sumergibles con que contaba el sistema de agua, solo una funciona, lo que deja a cientos de familias sin acceso constante al servicio. Además, estudios realizados reflejan que el agua que llega a las viviendas contiene exceso de sal y minerales, afectando la salud y las labores del hogar.
“Esa agua no sirve ni para sancochado. Mancha la ropa, daña las tuberías y obliga a los vecinos a buscar alternativas caras e inseguras”, denunció otro de los residentes.
A los problemas de agua se suma un sistema eléctrico deteriorado, con cableado en mal estado que provoca apagones y daños en los equipos de bombeo. Aunque el residencial cuenta con planta eléctrica, los vecinos aseguran que no funciona por falta de combustible y gestión.
Los moradores de Ciudad Bonita exigen de manera urgente la construcción de dos nuevos pozos, la reparación del sistema eléctrico interno y la convocatoria inmediata a una asamblea general de propietarios. Con carteles y consignas como “Agua limpia para Ciudad Bonita” y “Agua y luz para Ciudad Bonita”, la comunidad hizo un llamado a las autoridades y a la opinión pública para que su situación no siga siendo ignorada.
“Estamos cansados de los apagafuegos, queremos una solución definitiva”, reclamaron.
