Los residentes del sector Villa Mella, en Santo Domingo Norte, están seguros de una cosa: durante los últimos años el barrio ha avanzado, convirtiéndose en una zona de gran desarrollo social y comercial que contribuye al progreso de sus habitantes… Pero sus debilidades son las mismas.
Calles sin hacer y una alta delincuencia son las quejas que han sostenido en el tiempo los villamelleros sobre su localidad, encabezando un reclamo reiterativo a las diferentes autoridades, no solo a las del municipio, sino también a las encargadas de la seguridad y al Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC).
“Villa Mella está mejor que nunca, solo tiene dos problemas. Uno son las calles, que por más que uno pide y solicita que vengan y las arreglen no pasa nada, y el otro es la alta delincuencia”, afirmó Ángel Brazobán, quien reside en San Felipe de Villa Mella.
De acuerdo con Brazobán, quien fue apoyado por Julio Martínez y otros comunitarios, no se pueden contar las veces en las que se han realizado trabajos de intervención, pero solo de la calle principal, conocida como la carretera de Yamasá.
Aparentemente, los responsables del asfalto acuden, especialmente en tiempos de campañas electorales, para rellenar sitios puntuales de la calle céntrica, pero ignoran las vías laterales.
“En esta campaña ellos no han pasado, ojalá y que se motiven y arreglen estas calles porque es insoportable”, indicó Carmen Rodríguez, una señora de 49 años de edad que aseguró tener toda su vida entre las calles del barrio de Santo Domingo Norte.
Los días de lluvias son traumáticos para los vecinos por el lodazal, pero igual pasa con días secos por el polvo que ensucia sus ajuares.
“Como quiera es malo, ellos lo que tienen que venir y arreglar esa calle que es un problema que tiene la vida entera persiguiéndonos y no hacen nada”, dijo Rodríguez.
Delincuencia inaguantable
“La policía pasa, pero para lo que hace…”, manifestó uno de los lugareños, dejando la idea a la interpretación.
Sucede que diariamente van y vienen patrullas, pero solo hacen eso: ir y venir. Ni se detienen, ni se adentran entre los múltiples subsectores, donde aseveran que verdaderamente está el problema.
“No sirve de nada que la Policía pase y haga un bulto de que sí, que pasaron por aquí, si no entran a la cuna del problema. Donde de verdad están los delincuentes”, se molestó Julio Pérez, quien hace vida en la calle 32.
Según reportan, hace solo unos días una joven fue atacada a machetazos por antisociales cuando se dirigía a la universidad, ocasionándole heridas severas que le llevaron al hospital.
En sentido general, la gente está convencida de que en todas partes se dan los actos delictivos, en todos lados atracan y se camina con temor; sin embargo, piden, no mayor presencia policial, sino una más dedicada.
“Es que ellos pasan mucho, pasan varias veces al día, pero lo que nosotros queremos es que entren a los barrios, que pasen por los callejones, que supervisen la seguridad de verdad, no por arribita, haciendo un allante y todo el mundo haciendo lo que quiera”, refirió Sandra Marte.
